
Tras el infructuoso intento de ejecución
de una euro-orden de arresto contra Gabriel Pombo, a petición de la
fiscalía de Perugia (Italia), razón por la que fué trasladado a la
cárcel de Valdemoro, más a mano de los burócratas de la audiencia nacional, ahora han vuelto a trasladar al compañero a Villena
(Alicante). Exactamente una diagonal cruzando la Península Ibérica de
982km de distancia en ruta, que suponen unas 9h y 42m de viaje hasta
Pontevedra, provincia en la que según sus propias leyes debería estar
terminando de “resocializarse”. No entendemos
que el acoso moral contra su persona y afines sea un simple error
administrativo, es un castigo añadido a la privación de su libertad ante
el cual no estamos dispuestos a agachar la cabeza. Proponemos la
intensificación de acciones en solidaridad con Gabriel y adjuntamos un
modelo de fax para su envío a la dirección de la DGIP y a la prisión de
Alicante II (Villena).